La vehemencia en sus discursos, la predilección por el sector privado, y las simpatías y rechazos en el plano internacional son algunas de las coincidencias -palmarias- entre Donald Trump, que el martes próximo podría volver a la Casa Blanca, y el presidente Javier Milei. Pero detrás de estos rasgos comunes, algunos de los cuales los delinean como líderes de la “nueva derecha”, se esconden matices y diferencias que los alejan en su concepción del Estado y del comercio exterior, y de su visión sobre las cuentas públicas.